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viernes, 13 de enero de 2012

Un año en tweets (segunda parte)


Durante años, toda una generación de actrices y de truperas justificaron su participación en películas de dudosa calidad cinematográfica, y escaso presupuesto en vestuario, echándole la culpa al guión. Nunca creí esa excusa. Sospecho que ni ellas mismas lo hicieron. Nadie se podía tragar que esas mujeres firmasen contratos sin leer previamente el guión. Y más aún, que esas mujeres llegasen al rodaje y descubriesen que esa secuencia en la que se comían una manzana hubiese que rodarla en pelotas, aunque no existiese ninguna razón lógica para hacerlo. No me lo creo. Pero ellas, para salvaguardar su buena imagen, preferían decir que el guión las obligaba en lugar de reconocer que lo habían hecho por dinero.

Al gobierno de Rajoy le ha pasado como a las vedetorras de la época del destape: se ha visto obligado a echarle la culpa al guión. Se pasó casi cuatro años diciendo que no subiría los impuestos y tardó quince días en no cumplir su promesa. Dicen que lo hacen ‘por exigencias del guión’; en su caso, el guión apunta que el anterior gobierno mintió sobre la tasa de déficit. Y como a las truperas, tampoco les creo.

Yo también podría justificar la casi anacrónica segunda parte de este artículo echándole la culpa al guión. Porque pretender continuar con un resumen de 2011 a día 13 de enero de 2012 es como intentar llamar la atención de alguien anunciando que vas a desvelar el final de El sexto sentido. Pero como lo prometido es deuda y si no pagas la deuda, ya saben ustedes lo que pasa (excepto si eres banquero), he decidido empezar el año clausurando definitivamente el anterior. Como en Los Otros, no abras una puerta hasta que la anterior esté completamente cerrada. Allá va la segunda mitad de 2011 en mis tweets.


JULIO

“Cuando veo y escucho a banqueros y agencias de calificación crediticia entiendo por qué muchas huchas tienen forma de cerdito”

Camps deja la Generalitat para defender su inocencia. Nuevo ejercicio de burla política. Deberían legalizar las drogas para poder superar este panorama”

Back to Black, disco histórico y testamento brutal donde los haya. Por Amy, allá donde reposen las verdaderas estrellas de la música”

“Todavía me cuesta aceptar que el sistema de salud no sea sostenible en una crisis como esta pero los privilegios de la clase política, sí”


AGOSTO

“’La homosexualidad es peligrosa para la Humanidad porque niega las leyes de la naturaleza (Benedicto XVI)’. La virginidad de la Virgen, no”

“Hay católicos que siguen de tal manera a Jesús que un juez debería decretar una orden de alejamiento”

“Si se reforma la Constitución, yo quiero votar”


SEPTIEMBRE

“¿Os acordáis del sueño que tuve en el que Gallardón era ministro y Ana Botella, alcaldesa?”

“Si Alessio Rastani fuera español, Telecinco ya le habría hecho un contrato millonario para tenerlo de colaborador en La Noria

“No sé si da buena imagen que al frente de la SGAE haya personas que ganan más dinero con los derechos de autor que trabajando”

“Debe ser duro para el PSOE iniciar una campaña electoral en la que el principal enemigo de su programa es él mismo”

OCTUBRE

“Creo que con tanto parado sería buena idea que todas las mesas electorales tuvieran desempleados a los que pagar los 62 euros”

“Ya veo el titular de La Razón: Zapatero lleva al paro a ETA”

“Ha muerto Félix Romeo, un magnífico escritor, un extraordinario ser humano y uno de los padres de La Transversal. Horror y mucha pena”

“Con la muerte de Steve Jobs, la imaginación pierde un hijo”

NOVIEMBRE

“Estoy deseando escuchar a alguien del Gobierno en (de)funciones explicar el indulto a un banquero”

“Todos los interventores y apoderados que andan por mi colegio electoral son del PP. Me siento como el sheriff de The Walking Dead

“Para el PP libertad es que la gente pueda volver a fumar en algunos bares. No que cada cual pueda casarse con quien ama”

DICIEMBRE

“Murió Christopher Hitchens, autor de ‘Dios no existe’. El hecho de que no haya vuelto para decirnos que estaba equivocado le da la razón”

“A Carlos Fabra le ha vuelto a tocar la lotería. ¿Casualidad? ¿Suerte?”

“En Balears hay que pagar 10 euros por tener la tarjeta sanitaria obligatoria. Ese es el cambio”

“A mí me da que Urdangarín se compra la ropa en ‘Mango’”

“Ayer vi una serie y un docu sobre el cardenal Tarancón. Hoy, misa de las familias en Colón. Ahora me digan si España avanza o retrocede”.

“Feliz Añejo 2012”

jueves, 29 de diciembre de 2011

Un año en tweets (primera parte)

Han pasado muchas cosas. Es lógico. 365 días dan para mucho. Todos sabemos que el tiempo avanza con una parsimonia irritante cuando aguardas en la sala de espera del dentista mientras que cuando descansas, apaciblemente, en una tumbona cerca del mar, con un daiquiri en la mano, esos mismos diez minutos son la esencia de la fugacidad. Una de las características, si no la única, que ha marcado este 2011 es que ha sido una maldita consulta de dentista. Lo que iba a ser una limpieza de boca acabó con endodoncias, extrayendo las cuatro muelas del juicio y poniendo implantes a 500 euros cada uno. Sin anestesia.
Si tuviera que etiquetar 2011 en mi álbum de recuerdos, posiblemente apuntaría que fue el año en el que me abrí una cuenta en Twitter. No sé cuanto tiempo seguiré entreteniéndome con las redes sociales, lo mismo es un síntoma más del niño con canas que, pobre ingenuo, aún se niega a crecer pero no las demonizo. Al revés, me parecen estupendos foros de opinión y debate, rincones para la autopromoción, lugares en los que ironizar y ser comprendido, espacios para la frivolidad y hasta para el flirteo. O sea, una versión virtual de la vida misma.
Le doy importancia a ese dato menor porque he comprobado que me he pasado gran parte del año ‘tuiteando’ lo que me sucedía, lo que le sucedía a este país o lo que le sucedía al mundo, y no crean que por ello he dejado de vivirlo. Lo fantástico de todo esto es que lo cuentas mientras lo vives. Creo que Twitter es casi un medio de comunicación. De hecho, puedo resumir -algo que en estas fechas se lleva mucho- el año que acaba siguiendo mi timeline de 140 caracteres. Los seis primeros meses de 2011 los escribí más o menos así:

Enero

“Veo la peli La Isla. El mundo que retrata es el 2016. O sea, que Rajoy gana las elecciones y en cuatro años...mirad lo que pasa”

“Una nariz roja en solidaridad con Álex de la Iglesia”

“El nuevo disco de Rosario se llama Raska Triski. ¿Con qué cara te has quedado?”

Febrero

“Me he cruzado con un tipo por mi escalera que se parecía sospechosamente a Mubarak. Qué mal rollo…”

“Hay canción para Eurovisión. Escúchala y luego piensa que esa gente que la ha elegido también votará en las próximas elecciones”

“Estoy contra la violencia pero...una buena hostia a Justin Bieber sí que le daba”

Marzo

“Voy a ver La gata sobre el tejado de zinc caliente. Ha muerto Elizabeth Taylor”

“Que la serie Crematorio trate la corrupción urbanística y cuente con la colaboración de la Comunidad Valenciana me parece retroalimentación”

“La popularidad de Zapatero cae en picado. En Picado dicen que aún no la han visto pero que están escondiendo los ahorros en calcetines”

“Me gustaría saber si puedo imputar a obispos y demás jerarquía eclesiástica por delitos contra los sentimientos de gays y lesbianas”

“Gente que se queja de la radioactividad que puede llegarnos desde Fukushima mientras respira bajo la seta de contaminación de Madrid”

Abril

“Imagino la cara de la mujer de Sergio Ramos cuando él diga: “Déjame que coja un ratito al bebé”

“Me gustaría que los que aún creen que hay que ilegalizar Sortu (o Bildu) opinaran lo mismo respecto a Democracia Nacional o España 2000”

“¿Por qué cuando el Euribor se dispara nunca le da a un banquero?”

Mayo

“¡No! ¡Tirar a Bin Laden al mar, no!...¿pero es que los americanos no han visto Viernes 13?”

“EEUU cree que el mundo es un lugar más seguro tras la muerte de Bin Laden. Claro, como Sostres no publica en su país...”

“Cuidado. Algunos dicen que la acampada de Sol esconde ideología ácrata y que pide la abstención el domingo. Y eso no es verdad”

“Que en el cierre de campaña del PP todo el mundo corease “esto es democracia y no lo de Sol” me parece una provocación”

“¿Es que nadie va a hablar de los 10.381.043 ciudadanos que no han ido a votar?”

“Deberíamos juntar firmas para que Nacho Vidal haga una campaña publicitaria en Europa a favor del pepino español”

Junio

“Taboulé gana el III concurso de cortometrajes de RNE”

“Lectura interesante. ‘Sobre una democracia real: por qué ya no apoyo a Acampada Sol’”.

“Si IU era una alternativa, Pedro Escobar, diputado de IU por Extremadura, se la acaba de cargar”

“El PP sin Álvarez Cascos en sus filas, ¿se siente ligera de cascos?”

(Continuará…)

martes, 18 de octubre de 2011

Hoy quiero confesar

Les voy a contar algo, que para eso son ustedes seguidores de este blog. Algún privilegio debían tener, aparte de ser los primeros en ver el desnudo integral prometido en el caso de que llegue a los 1.000 seguidores en Twitter. Ya sé que pensarán que mis promesas valen menos que un cheque de Ruíz Mateos pero en mi defensa, debo confesar, que la foto del desnudo que prometí si pasaba los 100 en este blog me pareció una promesa exagerada. Si solo con 100 ya me despeloto, ¿qué haré con mil? ¿Sacarme un riñón? La proporción, ahí está la clave. De todos modos, aún me planteo lo del Formspring. Si no lo he hecho ya es porque atender otra red social puede acabar desquiciándome mucho más de lo que ya estoy.

Volviendo a los orígenes, les voy a contar algo. Los fans de "Las aventuras de Enrique y Ana" van a tener que demostrar su fidelidad con paciencia. Resulta que yo tenía en un disco duro todos los capítulos guardados. Resulta que están guardados en el formato de audio que se empleaba en RNE hace dos años. Resulta que ese programa para trabajar audios ya no existe y ahora trabajamos con otro. Resulta que los ordenadores ya no leen el antiguo formato. Resulta que en mi casa tampoco reconocen ese formato. Resulta que, a día de hoy, no encuentro los capítulos de "Las Aventuras de Enrique y Ana" y sí todas las preguntas del "Cuestionario Cinematográfico Automatizado ACME" (por cierto, la voz que pronunciaba esa cabecera era la de Félix Romeo, grande) que en su momento cedí a Javier Gallego para su Carne Cruda. Pero como diría el marido de la futura alcaldesa de Madrid, "estamos trabajando en ello".

Les confieso también que he solicitado ayuda, vía Twitter, para rediseñar este blog. Sé que a muchos de ustedes no les ha gustado el cambio. A mí no me desagrada pero tampoco me siento plenamente satisfecho. Él caso es que la mayoría de plantillas que encuentro por la red no acaban de encandilarme. Busco algo moderno, funcional, práctico, chulo y personal. O sea, un imposible. O no. El caso es que ya se han puesto en contacto conmigo dos personas que van a intentar convertir mi blog en algo más mío, más auténtico. Y eso me gusta.

Y también les voy a confesar que me asalta un poco la ansiedad respecto al 20-N. Sé que Wisteria Lane (antes Las aceras de enfrente, antes Entiendas o no entiendas) nació con la legislatura de Zapatero y no puedo borrar de mi cabeza que quizá acabe con ella. Como a todo el mundo en este país, me asusta el futuro. Me inquieta contabilizar las posibilidades que existen de mantener un programa como este con un gobierno de mayoría absolutista del PP. Sería bastante ilógico, conociendo lo que han hecho en la televisión balear y en la de Castilla-La Mancha tras su última victoria, que mantuvieran un programa que les da caña. Ojo, no porque sea un programa sectario ni prisionero de una ideología sino porque es un programa que habla de cultura y vida lgtb, entre otras muchas cosas, y los únicos que tienen un recurso en el Tribunal Constitucional contra el matrimonio entre personas del mismo sexo es el PP. El único partido nacional que se plantea eliminar ese derecho es el PP. El único partido que aplaude las salidas de tiesto de la Conferencia Episcopal es el PP. El único partido que todo lo hace bien, según la homófoba Intereconomía, es el PP. ¿De verdad creen que ellos van a tener la manga tan ancha y dejar el programa ahí donde está? No lo sé pero cuando pienso más de cinco minutos en ello, llego a una triste y desoladora conclusión.

Son tiempos difíciles. Pienso mucho en ello. Y cuanto más pienso más me doy cuenta de que, al menos desde mi punto de vista, no son exactamente lo mismo PP y PSOE. Puede que parezcan prácticamente lo mismo. Puede que en política económica, dictada desde tribunas más altas que las suyas, sean puntualmente iguales. Puede que a la hora de proteger su feudo y su nicho de poder sean sospechosamente iguales. Pero exactamente iguales...pienso mucho en ello y creo que no.


miércoles, 25 de mayo de 2011

Firma/osadía de estados de Facebook y Twitter


TOLO CAÑELLAS: "Solo quiero comer, fumar y que me corten las uñas"

PACO TOMÁS: "Que un club de alterne se llame 'Súpercolores' me parece un ejemplo de globalización"

TOLO CAÑELLAS: "¿Quién es Bin Laden?"

PACO TOMÁS: "No soporto a Justin Bieber. Y me da igual que sea menor. Hay menores que me caen fatal. Y punto".


Estos son solo algunos de los ‘estados’ de Facebook y Twitter que el periodista Tolo Cañellas y yo hemos publicado últimamente en las redes sociales y que este jueves, día 26 de mayo, firmaremos por primera vez, en el Café Olivera de Madrid (c/ Santo Tomé 8)

Cuando llega la Feria del Libro, los autores que han publicado durante todo el año, con mayor o menor éxito, se encuentran con sus lectores gracias a la popular firma de ejemplares. Las casetas se convierten en escaparates donde el mundo editorial coloca a sus estrellas con la intención de despertar el interés del público y de los medios de comunicación. Si no firmas en la Feria del Libro, es como si no hubieras publicado. Es la excusa perfecta para conocer a la gente que te lee, que comparte tus teorías emocionales a través del mágico ritual de la lectura.

Para nosotros, como dijo la escritora Soledad Puértolas, a la que nunca hemos leído, “en cuanto desaparece la inocencia de aficionado en el escritor, desaparece la literatura”.

Los estados que escribimos cada día, con una disciplina asombrosa, en Facebook y Twitter son, para nosotros, un nuevo género literario a mitad de camino entre el microrelato periodístico y la autobiografía. Un género que llevamos alimentando desde hace años y que en esta ocasión, y aprovechando la inauguración de la Feria del Libro, hemos decidido darle la relevancia que creemos que se merece. Por eso, el jueves 26 de mayo, a partir de las 20.00 horas, en el Café Olivera (c/ Santo Tomé, 8), firmaremos nuestros estados de Facebook y Twitter.

Hay personas que consideran que las redes sociales fragmentan, trivializan y banalizan las ideas. Que cada vez es más difícil generar pensamientos compuestos, subordinados o solo yuxtapuestos. Algunos lo llaman microfilosofía. Otros, novelas de 140 caracteres. En definitiva, anorexia mental.

Ese pensamiento, aparte de parecernos elitista y que desprecia con cierto aire de superioridad la cultura popular, nos parece tan erróneo como afirmar que un cortometraje de 5 minutos ‘fragmenta’, ‘trivializa’ y ‘banaliza’ las ideas porque con un metraje de 4 horas podríamos contar esa historia con mucho más pensamiento compuesto y subordinado.

Una idea siempre es breve. Es el trabajo posterior el que puede llegar a alimentarla hasta el sobrepeso. Hay estados de Facebook y Twitter que tienen más verdad, más compromiso, más intención, más lucidez, que muchos artículos de opinión. Y sí, también hay mucho sentido del humor. Y sí, también mucha frivolidad. Pero es que la frivolidad, la banalización, también pueden ser una forma de denuncia, como un estimulador del ingenio, al alcance de todos.

Además, ya hay un científico que ha asegurado que el uso de redes sociales hace que el cerebro produzca oxitocina, una hormona que generamos cuando nos besan o nos abrazan. De esta manera, el profesor Paul J. Zak, de la Universidad de Claremont, ha abierto la posibilidad de que las redes sociales produzcan placer. Aunque eso es algo que yo puedo afirmar taxativamente -y eso que no estaba en el mercado cuando apareció la aplicación del Grindr-, debo aclarar que donde esté un buen beso, que se quite la red social.

INSTRUCCIONES DE LA FIRMA DE ESTADOS

El protocolo es muy sencillo. Si eres amigo de Tolo Cañellas o mío (Paco Tomás) en Facebook, o nos sigues en Twitter, o simplemente te apetece pasarte por allí para ver qué se cuece, eliges aquel estado que más te haya gustado, que más te haya impactado, con el que más te hayas identificado o el que más rabia te de. Lo copias en un folio, lo imprimes y lo acercas hasta el local en el que te lo dedicaremos encantados.

Si no tienes tiempo de imprimir un estado, si no sigues a ninguno de los dos pero no quieres perderte la oportunidad de tener algo que hacer un jueves a las 20.00 horas, tranquil@. En el lugar de la firma tendremos varios estados ya impresos y habilitaremos una impresora, conectada a un ordenador, desde la que imprimir, en ese momento, algún estado que te guste.

Durante el acto, continuaremos publicando ‘estados’ en las redes sociales.

Y si lo que quieres es generar oxitocina pero pasas de las redes sociales, siempre podemos besarte.




domingo, 13 de febrero de 2011

Telebasura en la red social

ARTICULO PUBLICADO HOY EN 'DIARIO DE MALLORCA'


Cuando me ofrecieron escribir esta columna semanal, lo primero que pensé fue en un título. Hay escritores que van componiendo su novela y al final, eligen un epígrafe total. A mí me gusta empezar por el título, aunque sea muy provisional. Ponerle un nombre a lo que estoy escribiendo condiciona, en un principio, mi actitud frente al texto y también proporciona una confianza siempre necesaria cuando uno se enfrenta al abismo en blanco del papel. Tuve un brainstorming conmigo mismo y opté por ‘El ingenuo seductor’. Llegué a él a través de ‘El guardián entre el centeno’, la obra de J. D. Salinger, que cuando se editó en catalán apareció con el título de ‘L’ingenu seductor’. Sin vocación de pretencioso, opté por ese nombre por todo lo que tenía la novela de escaparate de las costumbres y escenas urbanas, de acuarela social. Y aquí estoy, convertido en un personaje más de mi propia narración; un personaje que en ocasiones puede pensar como el adolescente Holden Caulfield pero que, en el fondo, está dibujado por Daniel Clowes.

Todo este párrafo, que huele más a justificación que a prólogo, intenta revelar que quizá debería haber titulado esta columna ‘El ingenuo voyeur’ o ‘Mi vida en 140 caracteres’, dada la relevancia que las redes sociales están adquiriendo en mis últimos escritos, en detrimento de la vida real. Me pregunto si Holden Caulfield, el protagonista de ‘El guardián entre el centeno’, tendría perfil en Facebook. Sospecho que no. De tenerlo, lo tendría en Twitter pero, en el fondo, los pondría a todos a parir. El caso es que, si la semana pasada explicaba lo sorprendido que estaba ante la reacción de algunos (muchos) usuarios de Twitter ante la broma del director de cine Nacho Vigalondo, esta semana puede parecer que me contradigo. No es así. Creo que lo que transformaba en absurdo todo aquello no era la forma, sino el fondo; no era que el entorno de la broma fuera la red social sino que alguien se tomase la broma en serio. De hecho, el propio Vigalondo se lo ha contado a su manager en Los Angeles, que es judío, y se ha descojonado de la risa. Pero no creo que expresar tu opinión por Twitter sea menos importante, o relevante, que hacerlo en una entrevista en un programa de La Sexta, por ejemplo.

Esta famélica reflexión se desencadena cuando el presentador de La Noria, Jordi González, muestra su apoyo –vía red social; últimamente no voy a estrenos ni a nada- a Carla Antonelli y rechaza la línea editorial de Intereconomía, cadena de televisión en la que un neandertal llamado Xavier Horcajo criticó la entrada de la activista lgtb en la lista electoral del PSOE a la Comunidad de Madrid con varios insultos de una catadura moral y ética asquerosa. A ese mensaje de Jordi González, una usuaria contestó: “Y que eso lo diga uno que trabaja en la telebasura de Telecinco es para descojonarse”. A lo que el presentador respondió: “Telebasura tu puta madre, guapa”. Aquello corrió como la pólvora por el patio de vecindad y acabó siendo noticia del día, junto a las protestas en la plaza de Tahrir y el endeudamiento de las comunidades autónomas.

Podemos pensar que esa conversación virtual es menos destacable que si ese mismo diálogo hubiera sucedido en un plató de televisión o en una rueda de prensa. No entiendo porqué se le quiere restar importancia a la red social y convertirla en un parque de atracciones donde lo único que podemos hacer es divertirnos. Y volvemos a Vigalondo. El director de ‘Los Cronocrímenes’ apuntó: “Por favor, basta ya. No convirtáis Twitter en una reserva de moralina rápida. Lo de Jordi González es OTRA chorrada. NO ES RELEVANTE”. Estoy de acuerdo. No es relevante como lo es la situación política de Egipto o los despistes de Rato al frente del FMI. Pero no es una chorrada. Es una opinión. Una opinión que nos podría conducir a un interesante debate sobre si algo que eligen y consumen muchas personas no puede ser definido como ‘telebasura’ porque eso sería insultar a esas personas. Y que ese debate se genere en una red social o en La Noche en 24 horas, es indiferente.

Sólo añadir que por mucho que me guste una hamburguesa del McDonalds, nunca me sentiré insultado cuando se la defina como ‘fast food’ o ‘comida basura’. Sé lo que me estoy comiendo. Y sé lo que es un solomillo de ternera de Aliste. Que no somos tan bobos, señor González.



lunes, 7 de febrero de 2011

No me llames de usted, twitteame

Sofía Mazagatos era una visionara. Su capacidad para seguir a Vargas Llosa sin tan siquiera haberle leído no era otra cosa que el germen, quizá algo ingenuo, de lo que hoy en día se conoce como red social. Es totalmente injusto que los artículos y las películas sean para Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, y olviden a nuestra miss que empezó a seguir a alguien sin conocerlo. Eso es una red social. Como apuntaba el martes Alex de la Iglesia, “lo más duro de Twitter es descubrir que es exactamente igual que la vida: absurdo y cruel, dulce y maravilloso, complaciente y torturador”. Y lo hizo desde su cuenta en Twitter, la misma que empleó para adelantar que abandonaba la Academia, como un 'triunfito' más. (NOTA: Iván Ferreiro escribió en su twitter que vio a la chica de OT cantar su canción, ‘Años 80’, y le pidió a sus seguidores que no se “quemasen” con ella, que a él le pareció bien, que era una canción “jodida de cantar” porque te quedas sin aire, por eso él ya no la canta en los directos).

Esa vida de la que hablaba Alex es muy compleja; en todos sus parámetros, en sus peculiaridades, hasta en lo cotidiano de esas peculiaridades. Otro tema es si somos nosotros mismos quienes convertimos la ecuación en algo irresoluble. En cualquier caso, Twitter se ha convertido en una prolongación virtual de nuestra propia existencia, de nuestra propia personalidad, dominada por arrebatos instantáneos. Y en esas dos vidas, que son una, los impulsos siempre son cuestionados. Más aún si permanecen, constantes, en una pantalla LCD. (NOTA: Vicente Vallés, el de La noche en 24 horas, el único rincón de la televisión que se puede soportar sin que te invada la vergüenza ajena o la indignación, informa en su twitter que Rajoy desveló su programa: si es presidente derogará la reforma de la ley del aborto, el canon digital y la ley de Memoria Histórica)

La vida se nutre de la vida. Me sorprende que cada vez existan más noticias generadas por la propia red social. Alejandro Sanz, Ricky Martin, Arturo Pérez Reverte, David Bisbal,…han sido noticia por sus twitteos. También lo ha sido, y muy a su pesar, el director de cine Nacho Vigalondo. No voy a hablar de la causa que originó lo que algunos denominan ‘incendio de la red’ porque ya lo sabrán ustedes de sobra. Lo que me sorprende de Twitterland es que finja ser un lugar especial, una zona residencial en la que habita la élite de la red social –el que vale, vale, y el que no, al Facebook-, la generación de los 140 caracteres que ya ha superado, en número, a la población de España. Allí residen los que presumen de ser los más rápidos a este lado del Far West, los que desenfundan ideas, conceptos, ironías, noticias, a la velocidad del rayo. Pero la vida nos acaba resumiendo. No hay mucha diferencia entre los habitantes de Twitter y los de una calle cualquiera de cualquier barriada española. Ellos también son, pueden ser, masa. Una masa obtusa, incapaz de comprender, que responde al impulso con impulsos. Estímulos que de la misma manera que pueden movilizar a toda una población a favor de una buena causa, pueden ‘apalear’ a un ser humano con las mismas razones que empujan a una turba iracunda. Como la vida misma. Algo parecido le sucedió a Vigalondo. Soltó un chiste, quizá desafortunado, y los habitantes de Twitterland encendieron una mecha que, días más tarde, algunos medios de comunicación se encargaron de avivar. Mientras asistía, desde mi twitter, a todo eso no dejaba de pensar en La broma, la estupenda novela de Milan Kundera. Su protagonista, Ludvik, es expulsado del Partido Comunista por una broma escrita en un mensaje a una novia. Esa broma le convierte, de repente, en el enemigo del pueblo. ¿De verdad hubo alguien que creyó que Nacho Vigalondo era antisemita y negacionista por una broma, políticamente incorrecta, en un contexto llamado Twitter? Me preocuparía una respuesta afirmativa.

A veces tengo la impresión de que vivimos en una continua lapidación. Que como en la espectacular obra maestra de los Monty Python, La Vida de Brian, acudimos a ella semi disfrazados, cargados de razones y argumentos que estamos deseando estrellar contra la cabeza del otro. Y quizá Twitter no sea un lugar tan diferente. Quizá sea una prolongación más de esta maravillosa y traicionera existencia llamada vida.

(NOTA: He escrito en mi twitter que lo malo de escribir un artículo dominical es que todos los temas que te interesan están más trillados que la reputación de Sonia Monroy).